Semifrío de fresa con queso Quark

Gran descubrimiento este del queso quark, sobre todo cuando se te quejan de que haces demasiados postres, que si la repostería engorda, etc, etc., etc. Pues bien, os propongo un postre con muy poquitas calorías y hasta tolerable por los diabéticos (si cambiamos el azúcar por edulcorante).


Para todos aquellos que no lo habéis probado, el queso tipo quark es un queso batido elaborado con leche de vaca generalmente (aunque también se puede encontrar elaborado con leche de oveja, cabra o mezclas de ellas), de textura untuosa, suave y de sabor ligeramente ácido (o no tan ligeramente dependiendo de la marca que probéis), rico en proteínas  gran fuente de calcio y lo mejor de todo es que tiene un bajo contenido de calorías y bajo en grasas (hasta 0% de materia grasa según marcas).
Muy empleado en la cocina alemana, austriaca, en los países bajos y en los países del este, el queso quark sirve como base para salsas ligeras y postres.

Como aplicación de este tipo de quesos, hemos elaborado una tarta semifría de queso quark con fresas, aunque no sea ahora temporada de esta fruta. De elaboración sencilla y rápida, los ingredientes que necesitamos son los siguientes:
  • 500 gr de queso quark
  • 250 gr de fresas (si no hay fresas naturales podéis optar por usar fresas en conserva, como usé en este caso)
  • 2 huevos
  • 200 gr de galletas
  • 2 cucharadas grandes de azúcar
  • 1 cucharadita de esencia de vanilla
  • 1 cucharadita de canela
  • 5 láminas de gelatina
  • 50 gr de mantequilla a temperatura ambiente
Para elaborar la base de la tarta, picamos finamente las galletas en una picadora, mezclamos con la mantequilla, la canela, batimos 1 huevo y mezclamos todo hasta que nos quede una pasta compacta. Colocamos la masa en un molde desmoldable para tartas y distribuimos toda la masa por el fondo del molde. Precalentamos el horno a 180 ºC, horneamos durante 10 minutos y dejamos enfriar.

Para el relleno, separamos la yema de la clara del huevo restante. Mezclamos la yema con el azúcar y batimos con batidora de varilla, añadimos la vainilla y el queso quark, mezclando todo hasta obtener una crema homogénea. Por otro lado, montamos la clara a punto de nieve y la mezclamos poco a poco con la crema obtenida anteriormente.

Hidratamos la gelatina, sumergiendo en agua las hojas durante 10 minutos.Pasado este tiempo, escurrimos la gelatina y la disolvemos calentándola con una cucharada de agua sin que llegue a hervir y hasta que se disuelva completamente. Mezclamos la gelatina poco a poco con la crema obtenida.

Es importante en este punto, echar la gelatina sobre la crema muy despacio, ya que al estar caliente, si la echamos de golpe, la clara se nos bajará y hasta es posible que el queso con la yema se nos pueda cortar.

Lavamos y troceamos las fresas.

Sobre la base de galletas horneadas y fría, echamos un poco de la crema elaborada, cubriendo todo el fondo de la tarta, echamos las fresas y añadimos el resto de la crema haciendo que cubra todo el molde empleado.

Dejamos reposar en la nevera mínimo de dos a tres horas hasta que cuaje completamente.

Un postre delicioso, suave, fresquito y lo mejor de todo, con pocas calorías.

Tal y como comentábamos, el postre puede ser adecuado para un diabético, en cuyo caso reemplazaremos el azúcar por edulcorante y para la base, en lugar de galletas, podemos hacer una base de bizcocho con harina integral (2 cucharadas de harina de trigo integral y un huevo, mezclamos y horneamos)


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...